Escrita
por Dolores Reyes
Publicada
por Sigilo y R+N
Recomendado
para jóvenes lectores
Novela
Hace unos pocos
meses esta novela ganó notoriedad porque fue censurada en Argentina. La razón
que se esgrimió fue la existencia de un par de escenas “pasaditas de tono”. Es
decir, descripciones sexuales explícitas. En algún momento, una argentina insigne,
para más señas sopafóbica, señaló que la gente se escandaliza más por un par de
besos que por la violencia explícita y, en muchos casos, gráfica. Mafalda hacía
el contraste entre las telenovelas y los noticieros, pero de alguna manera también
aplica el caso. Para los adultos, el asunto del sexo es algo que no debe ser
contemplado ni discutido y si pasa por fuera de la escuela es lo mejor, más aún,
si no se discute o se conversa es muchísimo mejor. En pleno siglo XXI hay cosas
de las que es mejor no hablar.
A grandes
rasgos, Cometierra es una novela de crecimiento donde asistimos al desarrollo
de una mujer capaz de comer tierra e intuir, adivinar, saber, lo que ha
sucedido ahí. En este caso su don resulta muy útil para identificar lo que
sucede alrededor de diversas víctimas de desaparición. Asistimos también a su
marginalización y veneración, a su señalamiento como bruja. A partir de este
don, Reyes indaga en la profunda violencia estructural que existe en su país y
en nuestro mundo. Un mundo donde las desapariciones, de hombres y mujeres se
dan por las más diversas razones, pero muchas de ellas rodeadas de secretismo y
brutalidad; se trata de una violencia que no conoce géneros ni edades y de las
que nuestra protagonista, quien no es identificada por nombre alguno, es testigo
y vindicadora.
Como novela Cometierra
maneja un ritmo claro, con momentos de su historia claramente diferenciados,
pero cuyo desenlace deja mucho que desear. Ya a finales del segundo tercio se
comienza a sentir como una serie tipo CSI, en donde la protagonista resuelve crímenes
y hace alguna reflexión, pero donde no es claro hacia donde, hacia qué, apunta
el relato. Esto explica también el final que se siente abrupto y forzado, como
si la autora misma no supiera como seguir. Quizá por ello mismo hay un segundo
libro, Miseria, que continua la historia aquí narrada. No sé en particular si
esto fue pensado así desde el principio o un accidente dejado por el éxito de
la novela. Asumo que quienes hayan gustado de la misma podrán dejarnos sus
comentarios.

Comentarios
Publicar un comentario