EL GIGANTE ENTERRADO



Escrito por Kazuo Ishiguro

Traducido por Mauricio Bach

Publicado por Editorial Anagrama

Recomendado para Grandes lectores

Literatura fantástica

 

     Esta es una historia de Amor. Es la historia de Axl y Beatrice. Es también una historia acerca de la importancia de la memoria y de la guerra y de la paz que se consigue a cualquier precio. Sin embargo, sobre todo es una historia de Amor. No el amor violento y apasionado, sino de ese amor que se construye a través de las décadas, que se soporta en secretos acuerdos, en olvidos cómplices y en la ternura de la cotidianidad.

     No sé bien cómo llegué a este libro. Recuerdo haberlo visto en algún momento, sentirme atraído por su portada, y tenerlo presente, muy presente, sin haber podido acceder a él a través de plataformas digitales, hasta que, como muchos otros, me llegó desde una biblioteca pública. Lo leí en cuatro días, abandonándolo por mi trabajo y mi cansancio y retomándolo por las noches. Ni una sola página me decepcionó. Escribo esta reseña mientras mi esposa lo inicia, y temo y me maravillo por lo que le espera, porque a mí me ha roto un poco el corazón.

     La historia se sitúa en un mundo postartúrico, un mundo que se sitúa en la paz que ha legado Arturo, pero en la que impera principalmente le olvido. Hay leyendas y supersticiones, pobreza y mucha tristeza. Axl y Beatrice parecen ser solo dos personajes más en este mundo. Un par de ancianos que deciden, después de pensarlo a lo largo de los años, ir a visitar a su hijo, del que no recuerdan mucho y que vive en una aldea hacia la que se dirigen más de la mano del sino que del conocimiento. Hay ogros en este relato, y demonios y duendes y algún poder divino. También hay una isla.

También hay una isla.

¿Tal vez la isla a al que fue trasladado el cuerpo de Arturo después de su muerte?

     Ishiguro nos narra con delicadeza el viaje de este par de ancianos y somos partícipes de los temores de Beatrice y la confusión de Axl. Sin embargo, a medida que viajan también van teniendo algunos recuerdos de quienes fueron en el pasado. También asistimos maravillados a sus encuentros, incluso cuando se topan con el legendario sir Gawain, sobrino de Arturo, y conocemos acerca de su misión.

     Princesa, llama todo el tiempo a Beatrice, mientras ella pregunta todo el tiempo a lo largo del camino, “¿Estás ahí, Axl?, ¿estás ahí?”. “Aquí estoy, Princesa”, responde Axl. Eso es todo lo que necesitas saber. Eso, y que Dios también olvida. "Y si algo no está en la mente de Dios, entonces, ¿qué posibilidad hay de que permanezca en nosotros, hombres mortales?" (p. 79)

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