ANDERSEN PARA CONTAR Y CANTAR

Adaptado por Silvia Andrea Valencia Vivas

Ilustrado por Lina Marcela Herrera Duarte

Editado por La madriguera del conejo

Recomendado para los pequeños

     Conozco a Silvia Valencia desde hace muchísimos años, y, desde la barrera, la he observado cada vez que intenta una nueva quijotada en pro de la cultura. Es, también, una de las personas más tozudas que conozco, así que en muchas ocasiones consigue que otros también vean gigantes en lugar de molinos de viento. No importa la labor de los encantadores, ella consigue imponer su visión de la realidad. Así lo ha hecho con El Globo, su restaurante dirigido a los niños; así lo hace ahora con La madriguera del conejo. 

     Uno de los primeros proyectos de La madriguera del conejo, editorial joven, jovencísima, es Andersen para contar y cantar, una adaptación de tres obras de Hans Christian Andersen (El patito feo, El soldadito de plomo y Pulgarcita). Por supuesto, hay escrituras y reescrituras de los clásicos a granel, empero Silvia decidió apostar por un nuevo nivel de dificultad, así que las vertió a verso. No contenta con ello, las convirtió en canciones (de ahí lo de para contar y cantar), que pone a disposición de sus auditorio en su espectáculo Cuento Cantao. 

     Tampoco Silvia está sola en esta quijotada. A su lado en esta edición en particular, se encuentra Lina Marcela Herrera, dulce como ella sola, con un talento increíble, en este caso para la ilustración. Es importante atender a los detalles, cada trazo, cada color elegido, ha sido primorosamente pensado, concebido, creado para transmitir las emociones que alguna vez tuvimos al acercarnos por primera vez a los cuentos de Andersen (todavía recuerdo mi estremecimiento al descubrir que dentro del pescado estaba el soldadito de plomo y así volvía junto a la bailarina).

     El conjunto de la obra consigue emocionar y conmover al lector por igual; sacarle una sonrisa en determinados instante, en tanto en otros los deja perplejos, exigiendo la relectura de tal pasaje o el detenimiento en tal ilustración. Así mismo, el lector trasegado, sonreirá a su vez al descubrir ciertas interpretaciones, ciertas sutilezas prestas a sus ojos u oídos. 

     Andersen para contar y cantar se convierte así en una obra dirigida a los pequeños, pero siempre apta para el corazón que escucha. 

P.D.: La iniciativa de la editorial La madriguera del conejo, es una iniciativa de: El Globo, Casa de la lectura y Cuento Cantao.