EL OSO QUE NO ESTABA



Escrito por Oren Lavie
Ilustrado por Wolf Erlbruch
Traducido por Marina Bornas
Editado por Barbara Fiore Editorial
Recomendado para los pequeños
Libro ilustrado

     Hubo un tiempo en que despreciaba la literatura infantil, entonces, Elizabeth, mi esposa, decidió que era mejor sacarme de la ignorancia y me presentó, con paciencia y pasión a autores como Roald Dahl, Anthony Browne y Crhis Van Allsburg. Luego, yo solito, encontraría Juul y El libro triste, y lo que doy en llamar libros problematizadores. De manera tal, que de cuando en vez doy con un libro infantil que me llama y no me suelta, como en este caso.

     Esta es la historia de un Picor que nació oso cuando buscaba donde rascarse. Es también la historia de la búsqueda de un oso por saber si es exactamente el oso que era o era otro oso. Es también la historia de muchos encuentros que ayudan a nuestro héroe oso a determinar si sí es él, o, por el contrario, es otro.

     Por supuesto, El oso que no estaba es un relato acerca de la identidad, del hacerse preguntas constantes acerca de uno mismo y de los demás para determinar quiénes somos, qué nos caracteriza y qué nos identifica. Es, además, una presuposición acerca del valor de lo positivo frente a lo negativo, y de lo que cada quién quiere para sí mismo a pesar de los otros.

     Con todo, el ambiente que rodea a nuestro amigo oso no es necesariamente positivo, en el camino se encuentra con una vaca con instintos de sofá y una lagartija perezosa, también con un pingüino pintoresco y una tortuga con ínfulas de taxi; elementos todos que lo llevan al final a encontrarse en medio del bosque.    

     Aunque a primera vista es un relato sencillo, el libro de Oren Lavie se dirige profundamente al espíritu del lector. Por otro lado, el primoroso trabajo de Erlbruch sirve de contrapunto a las palabras de Lavie, poblando de matices los personajes y en entorno en el que estos se mueven. Así mismo, se agradece el juego tipográfico que se presenta. Sin embargo, las márgenes estrechas que se plantean en la diagramación de algunas páginas hacen ver las páginas abarrotadas en muchos momentos, lo que puede abrumar a un lector en proceso.

     En resumen, la dupla Lavie - Erlbruch logran una propuesta profunda y atractiva, que aúna la estética con la profundidad, logrando así un libro atractivo a jóvenes y mediadores.

Comentarios