Escrito por Howard Philips Lovecraft
Traducido por José A. Álvaro Garrido
Editado por Editorial EDAF, S.A.
Recomendado para jóvenes lectores
Ensayo – No ficción
Howard Philips Lovecraft es uno de los referentes de la literatura de
terror más relevantes de la historia.
Está en un panteón junto a Edgar Allan Poe, Bram Stoker y Arthur Machen, entre
otros grandes nombres. Es también el antecesor directo de escritores como
Stephen King, Clive Barker y John Ajvide Lindqvist. De hecho, la literatura de
terror no sería la misma sin él.
Es cierto que a Lovecraft se le puede poner
en entredicho por realizar un trabajo en ocasiones esquemático, la
inverosimilitud de sus diálogos o el excesivo empleo de los términos
inenarrable o innombrable. Sin embargo, el mundo de la fantasía no sería el
mismo sin Cthulhu y los primigenios.
Lovecraft inaugura algo que denomina horror
cósmico y construye sus propios precursores en nombres como Mary Shelley, Sir
Walter Scott e incluso William Blake. Así, el ensayo El horror sobrenatural en la literatura, texto central de esta
publicación, es un trazado de la literatura de horror sobrenatural desde el
inicio de los tiempos hasta detenerse en Poe y luego, en sus propios
contemporáneos, en autores como Arthur Machen, Algernon Blackwood y Lord
Dunsany, entre otros. El ensayo es un rastreo preciso y detallado del género
que se engendra alrededor del miedo, comenzando por su detonante psicológico, “La
más antigua y poderosa emoción de la humanidad es el miedo, y la clase más
antigua y poderosa de miedo es el temor a lo desconocido” (p. 125). Así, Lovecraft
comienza su rastreo, saltándose las grandes tradiciones de las primeras
civilizaciones, cuyos relatos desconoce o simplemente decide dejar a un lado
por desconocer sus costumbres o por falta de interés. Así, en el aparte VII,
titulado La tradición sobrenatural en
Norteamérica, comienza el inicio de esta tradición desde un punto meramente
eurocentrista, “Estados Unidos, además de ser heredero del usual folclore
oscuro llegado de Europa, tenía su propio y adicional fondo de asociaciones sobrenaturales, por lo que tales leyendas
espectrales habían sido ya ampliamente reconocidas y volcadas a la literatura.”
(p. 178). Sin embargo, cuando el lector anticipa que se reconozcan los antiguos
relatos de los pueblos aborígenes, se encuentra en cambio que
Ese
fondo adicional [los temas fantasmales] procede, tal y como Paul Elmer More ha
señalado, del tremendo interés espiritual y teológico de los primeros
colonizadores, además de la extraña y sobrenatural naturaleza del paisaje en el
que se vieron inmersos. Las inmensas y penumbrosas selvas vírgenes en cuyo
crepúsculo perpetuo podían acechar toda clase de terrores, las hordas de
cobrizos indios, cuyos aspectos saturninos y extraños y violentas costumbres
apuntaban con fuerza a la hipótesis de un origen infernal (…) (pp. 178-179)
No es extraño entonces que su rastreo
histórico se detenga principalmente en Europa, excepto cuando hala de Edgar Allan
Poe y construye su propio círculo de escritores de lo sobrenatural. Con todo,
este ensayo es un riguroso recorrido alrededor de la historia del relato gótico
y sus antecesores, así como un buen recorrido a través de sus principales
autores y autoras, pues se detiene por igual, o más, en Shelley que en Stoker,
reconociendo por igual la importancia de hombres y mujeres en la construcción del
género que llama por igual sobrenatural o de terror.
Por otro lado, El horror sobrenatural en la literatura y otros escritos contiene
también otros textos en donde defiende el horror sobrenatural, algunas de sus
creaciones y se detiene en la apología de escritores como Lord Dunsany y Robert
Erwin Howard.
En conjunto, aunque debe ser mirado de
forma crítica, se trata de una obra que
genera interés en todo lector interesado en la literatura fantástica, en
general, y del horror en particular, sí como de todo aquel interesado en la
estética de Lovecraft, quien en numerosas ocasiones destacará la importancia de
la atmósfera por encima de la trama o de la construcción de los personajes. En
este orden de ideas, en Algunas notas
sobre ficción interplanetaria, dirá,
Ha de ponerse énfasis, además, en todo momento, en
el portento que supone la anormalidad
central, que es la que da pie a la narración. Debe recordarse que cualquier
violación de lo que nosotros entendemos por ley natural es, en sí misma, un
elemento mucho más tremendo que cualquier otro suceso o sentimiento que pueda
afectar a un ser humano. (…) Los personajes, aun cuando han de ser naturales,
deben estar subordinados al portento central, alrededor del cual están en
danza. El verdadero héroe de un cuento prodigioso no es ningún ser humano,
sino, simplemente, un grupo de fenómenos.
(p. 52)
Y luego, “La atmósfera y no la acción es lo
que hay que cultivar en las historias extraordinarias” (p. 53).
De esta manera, El horror sobrenatural en la literatura y otros escritos nos ofrece
una visión de un autor que no sólo construyó un mundo sobrenatural, sino que
también se detuvo a concebir una estética de este tipo de literatura, siendo
así, un completo agasajo para el lector de fantasía.
Me gustaría saber porque lo recomiendas para "jóvenes lectores".
ResponderEliminarMe gustaría saber porque lo recomiendas para "jóvenes lectores".
ResponderEliminarLa primera de las razones es un listado de ficciones por visitar. Por otro lado, maneja un estilo sencillo, en este texto, que le permite acceder con facilidad al lector. En este orden de ideas, el joven curioso que quiera examinar un poco los mecánismo de la fantasía, puede empezar por aquí.
ResponderEliminarLovecraft se centra en la tradición Europea y desprecia la indígena americana porque, ahí donde lo ve, era tremendo racista y antisemita. Tremendo nazi pues, pa' que me entienda.
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