Autor: Haruki Murakami
Editorial: Tusquets Editores
Recomendado para: Jóvenes lectores
Novela
Cada vez que me preguntan acerca de que trata esta obra de Murakami, sólo
puedo contestar que va de fantasmas. Luego me doy cuenta que cuando leí crónica del pájaro que da cuerda al mundo
contestaba exactamente lo mismo. Y es que de hecho me cuesta utilizar más
palabras para no develar la trama o para no simplificarla en demasía. Lo
curioso es que en ninguna de las novelas hay fantasmas. Sin embargo el mundo
que dibuja es fantasmagórico, los personajes entran y salen del mundo
sobrenatural mientras hablan con gatos o se enfrentan a personajes que están
más allá de nuestras reglas, Quiere decir
que, como no soy dios, ni tampoco soy Buda, no necesito juzgar el Bien y el Mal
del hombre. Tampoco tengo ninguna necesidad de actuar conforme a los principios
basados en el Bien y el Mal. (p.433)
Sus personajes principales, el joven Kafka Tamura y Satoru Nakata, desafían
una y otra vez nuestros propios tabúes en busca de reconstruir sus propias
existencias y la existencia de aquello que fue, un hilo temporal roto por
accidente con consecuencias no previstas por ninguno de ellos. Son héroes
lunares que alcanzan sus objetivos a costa de sí mismos, rompiéndose y
rehaciéndose entre tanto. Héroes rotos que arrastran a quienes lo ayudan en una
vorágine que en apariencia los deja intactos pero que en lo profundo los transforma
también, profundizándolos, complejizándolos y dotándolos de una fuerza que va
más allá de lo físico, para centrarse en esa fuerza que nace de la voluntad y del
ser, hundiéndose en el mundo de la ética y la estética.
Al final, redimidos y transfigurados, los héroes de la historia dotan de algún
orden al extraño mundo en el que se han sumergido. Y sin embargo nada importa,
todo sigue siendo igual. Como siempre.
La tierra continúa rotando
sobre su eje. Y, sin ninguna relación con ello, todos nosotros vivimos dentro
de un sueño. (P. 456)
Añadiría yo, en el sueño de Eyanael.
Entre tanto, cerrado ya el libro, acabada la historia, sentimos que los
personajes se niegan a abandonarnos y se instalan en nuestras vidas, en nuestra
conciencia, convirtiéndose en fantasmas, en asuntos pendientes, de nuestra
propia cotidianidad.
¿Se parece a algo que haya leído antes? Creo que me siento, como cuando tú lees algo mío.
ResponderEliminarNo con exactitud, es muy diferente a muchas cosas que hayamos leído. Por cierto, acerca del libro de LAguna sólo puedo decirte que aquí no es fácil encontrarlo, a menos que a los mensos de la Librería Nacional se les haya ocurrido. Yo lo conseguí en la Feria del Libro del Pacífico, en el puesto de La madriguera del conejo.
ResponderEliminarOtra vez no me expliqué bien me refería que al leer Tu RESEÑa me sentí como tú te debes sentir cuando lees algún escrito mío (no literario).
ResponderEliminar