Benjamín Lacombe



Todo empezó con un libro. En especial uno que Danny me presentó, Herbario de las hadas (que espero pronto poder reseñar, tan pronto como Danny suelte el libro). Quedé tan impresionado por las imágenes del libro que se lo presenté a Elizabeth, a quien las imágenes le sonraon de algo. Así que acudimos a san Google, pusimos Herbario de las hadas  y descubrimos el nombre de Benjamín Lacombe, autor de libros como Los Amantes mariposa e ilustrador de múltiples recopilaciones de  autores y relatos clásicos (no puedo dejar de anotar aquí la nota, con un leve punto de censura, que presenta El País de España a raíz de las diversas versiones del clásico cuento de hadas: “…el final de la cruel madrastra es terrorífico. "Habían ordenado calentar sobre carbón ardiendo los zuecos de hierro con los que se castigaba a las brujas. Con unas pinzas, los pusieron delante de la reina. La terrible madrastra tuvo de calzarse los zuecos incandescentes y bailar y dar vueltas y más vueltas en medio de los invitados, hasta que cayó muerta". Y todo porque Lacombe sostiene que a los niños no hay que sobreprotegerles.” - http://blogs.elpais.com/papeles-perdidos/2012/03/blancanieves-no-es-solo-disney.html- ). Sin embargo, todo hay que decirlo, lo que más llamó la atención de mi esposa fue la apostura del ilustrador francés –ustedes juzgarán-. Como punto adicional debo mencionar que Elizabeth daba por hecho que yo conocía Los amantes mariposa. Cuando le respondí que no, dio por hecho que mi inmensa ignorancia tenía que ser disminuida y al día siguiente me plantó el volumen en mis manos.
Lo primero que llama la atención de un libro que de repente es tan mencionado es la calidad y la belleza de la ilustración. Y es que Lacombe no se anda con chiquitas precisamente cuando se trata de ilustrar, la mayor parte de sus libros son de gran formato y suele ocupar las dos páginas para lograr un mayor efecto. Las imágenes que acompaña a Los amantes mariposa logran ser sobrecogedoras en muchas ocasiones. Sin embargo no me sucedió lo mismo con el texto. Lo noté frío, sin gracia, casi que sin vida. Como si el autor se hubiera dedicado a hacer la tarea y no a contar de corazón un relato ambientado en el oriente medieval. En comparación con Los cazadores de sueños de Neil Gainman (Lo he reseñado aquí con anterioridad) no se siente el aroma de oriente en las palabras de Lacombe. Esa poesía es casi extraña, teniendo como resultado un texto un poco seco.
Desalentado sin embargo me lo llevé para mi consulta donde lo descubrió una chica atormentada por las excesivas preguntas a las que siempre es sometida cuando termina de leer un libro  y quedó prendada de él. Tanto del relato como de sus imágenes.
Aún no sé qué idea hacerme de Lacombe, si bien es increíble como ilustrador, sólo lo he paladeado una vez como escritor, así que quizás sea precipitado juzgarlo por un solo volumen. Si habéis leído a Lacombe, lector fiel, hacedme saber vuestra opinión sobre él.
Mientras puedo ver a fondo el Herbario de las hadas os dejo un tráiler como adelanto: 

Comentarios

  1. Es un ilustrador genial y es chusco. ¿Qué más se le puede pedir?

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  2. Sus ilustraciones me recuerdan mucho las de Rebecca Dautremer, de hecho, en un principio pensaba que "Los Amantes Mariposa" había sido ilustrado por ella. Será porque ambos son franceses? En fin.

    Debo confesar que la mayoría de sus ilustraciones -al igual que las de Rebecca- me fascinan, sin embargo, no con todas me ocurre lo mismo. Algunas, logran empalagarme por tener cierto aire "Crepusculiano" -ahora que está de moda todo el tema de vampiros- como es el caso de "Genealogía de una bruja". Me dejan la sensación de estar ilustrando a la orden del día...

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