NADA

Autora: Janne Teller

Colección: Biblioteca furtiva.

Editorial: Seix Barral.

Novela.

Recomendado para: Jóvenes lectores.

Hace quince minutos escasos acabo de terminar la lectura de Nada. Era una historia a la que le tenía ganas desde que el grupo Planeta la anunció en facebook hace cerca de un mes. La idea me parecía tentadora. Un niño de catorce años que descubre de un momento a otro que nada tiene significado y se sube a un árbol de ciruelos para gritarle su descubrimiento a todo el mundo. No sabía más. De hecho cuando Elizabeth fue a la feria Internacional del libro de Bogotá, se lo encargué pensando que era un libro-álbum. Eliza me trajo hermosos libros como El eternauta y La vuelta al día en ochenta mundos pero de Nada nada. Era sólo un libro blanco, sin ilustraciones, me dijo. Afortunadamente, sabiendo de la debilidad de mi esposa por los libros infantiles me di también a la tarea de acosar hasta el cansancio a Danny, mi bibliotecario de confianza, quien finalmente cedió y se dio en traer el libro. Tuve que esperar unos cuantos días hasta que el proceso de catalogación terminara. Luego Nada se apoderó de mi esposa hasta ayer. Cuando nos encontramos me blandió el libro en el rostro diciéndome, tienes que leerlo. Como si no lo supiera. Soy Sam Spade, cazador de libros problematizadores.

Nada respondió a todas mis expectativas y un poco más. No tiene una sola ilustración pero en cambio posee una trama tan sencilla como magnética. La historia comienza con un niño de catorce años que descubre que la vida no tiene significado a través de los siglos. Que todo se transforma constantemente y que aún la eternidad es fugaz si se las contempla con los ojos de las piedras –si se me permite utilizar una metáfora de Ospina-. Si la cuestión se redujera a la certeza de Pierre Anthon de que nada vale la pena tal vez fuera algo baladí. Empero la situación se complica cuando el continuo canto de que todo es nada de Anthon, llega a los oídos de sus compañeros de clase que se empecinarán en responder que sus ideas son falsas encontrando para ello algo que finalmente tenga significado. Ante la ausencia de significado, ante la pérdida de perspectivas, los compañeros de Anthon se quedan sin elementos para medir la magnitud de sus actos. La única forma posible de responder ante la nada es encontrar algo que no sea efímero. El resultado de todo este esfuerzo lo encontramos, quizás, en un pequeño pañuelo a cuadros.

No se puede salir de las páginas de este libro de la misma manera en que se entró. No en vano es un libro que ingresa al pequeño teatro de la crueldad por la puerta grande. Se trata de un libro rechazado que refleja mucho de la forma de ser de los europeos. Que nos explica el por qué en Europa aumenta la tasa de suicidios ante la ausencia de elementos cohesionadores. El grupo de compañeros de Pierre Anthon y de Juul tal vez los encuentren en su propia sevicia.