Ipad y lectura



La principal diferencia entre el Kindle y el ipad es que el primero de ellos está diseñado tan sólo para leer en tanto que en el segundo la lectura es una aplicación posible entre otras tantas. Diana Uribe mencionaba en unos de sus programas sobre la historia del libro que este, con la cultura digital, había regresado a la idea del papiro. Mientras que en el texto impreso conformado por páginas se puede avanzar y retroceder de acuerdo a la numeración que permite ubicar de nuevo el pasaje deseado de acuerdo a unas coordenadas numéricas y espaciales fácilmente identificables, en nuestro papiro moderno es un poco más complicado. Para hacer esto en un libro electrónico hay que desenrollar el papiro y, sin la referencia visual de derecha o izquierda, de haber avanzado poco o mucho, encontrar un pasaje en especial se hace mucho más complicado. Lo mismo sucede con el kindle (aunque hay que señalar que en su formato especial las funciones de marcar, subrayar y comentar son mucho más sencillas). En el ipad esto cambia, comenzando por que el cambio de páginas no se hace con un botón si no con el dedo. Accedemos así a un libro que se halla en una pantalla con la que en verdad podemos interactuar.

Quizás uno de los avances más importantes del libro electrónico en el ipad se halla precisamente en este último punto. Mientras el kindle continúa con la tradición de la letra escrita y pantalla a blanco y negro, algunas editoriales han visto en el ipad una posibilidad para ir más allá. De esta manera se han comenzado a desarrollar otro tipo de libros, en donde el soporte multimedial es mucho más utilizado, enriqueciendo de esta manera la experiencia de la lectura. Así lo podemos ver en los adelantos que se han podido observar de “Alicia en el país de las maravillas” y de Penguin books.

Esto no hace del ipad una panacea. Como se señaló anteriormente se trata de sólo una aplicación en un dispositivo que desarrolla cientos de aplicaciones diariamente. Al realizar lectura en voz alta con el kindle la pregunta de mis estudiantes fue ¿Por qué no un ipad? Por economía, distracción y portabilidad. Me siento más tranquilo con un kindle en la mano mientras camino que con un ipad (hay que tener en cuenta los niveles de inseguridad de mi país), el primero es más económico que el segundo y ya que se trata de un dispositivo exclusivamente para leer, me evito distraerme con facilidad navegando en internet o jugando (también hay que tener en cuenta el nivel de hiperkinesia propio). Desde otro punto de vista, el ipad no deja de ser un computador, eso quiere decir que el nivel de brillo de la pantalla también puede afectar al lector común. Añadiría algo más, al ser táctil siento más frágil al ipad que al kindle.

Por supuesto se trata de gustos y potencialidades. Espero que próximamente el kindle venga con una pantalla policromática y la posibilidad de leer comics.

Comentarios

  1. ¡Qué maravilla! Una cosa es haber leído todos tus artículos sobre el tema y otra es verlos en acción.

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  2. Yo aun espero que para acceder a la lectura a través de estos dispositivos solo haga falta saber leer.

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