Clubes de lectura: consolidación


La parte más difícil, como en todo proceso, no es comenzar sino consolidar. Mantener un club de lectura es un trabajo de persistencia, de tenacidad y de resistencia. El mediador debe saber mantenerse en un punto medio entre lo que es novedoso, lo que es interesante y lo que tiene calidad. Debe saber escuchar a quienes conforman el club pero también guiar y orientar hacia otro tipo de lecturas. Por ejemplo si a los lectores en formación les interesa el tema de los vampiros hay que saber contextualizarlos y no dejarlos pensando que el género empieza y acaba con “Crespúsculo” y “True Blood”. Hay muchas obras a las que no se les mira por desconocimiento.  Muchos de quienes comenzaron con la obra de Meyer descubrieron “Cumbres Borrascosas” y luego “El Vampiro” de Polidori.
La consolidación de todo el proceso tiene que ver con lograr mantener el interés. Y esto se hace no sólo a través de la selección de buenos libros sino manteniendo un buen ritmo y una buena ambientación, así como actividades que refuercen los lazos de amistad y camaradería entre los participantes. Un club de lectura no tiene nada que ver con una labor curricular, debe ser un espacio para compartir gustos (y disgustos) a partir del encuentro con la literatura.
Es bueno así mismo utilizar otro tipo de elementos que refuercen el sentido de pertenencia, como separadores, botones incluso camisetas que hablen de los  libros, personajes, frases y autores  que han sido abordados desde el club de lectura. Esto refuerza el sentido de pertenencia y hace más especial las reuniones.
El límite, como siempre, es la imaginación.
P.D. Si usted pertenece o asiste a un club de lectura nos encantaría conocer su experiencia. 

Comentarios

  1. Tienes razón, la pregunta a los lectores del blog es: Si tienen un club de lectura ¿Cómo mantienen el interés?

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